Nos despertamos tarde, en torno a las 10 de la mañana en el Hellfire hut. Es mejor esperar a que se vallan estos pesados antes de ponernos en marcha. Llevamos 2 noches sin pegar ojo por las fiestas nocturnas de nuestros compañeros europeos. Llega a ser bastante molesto cuando no te dejan descansar después de pasar todo el día haciendo el jaimito por la selva, las dunas y el BARRO. Los quisimos matar en mas de una ocasión en los últimos días...
Nos quedan 7 horas por delante hasta llegar a Mason Bay... tenemos que subir un par de montañas, bajarlas y caminar por una playa kilométrica, solo esperamos que la marea nos acompañe y podamos cruzarla sin problemas... además nunca se sabe como puede estar de revuelto el mar.
Es un camino precioso siguiendo la costa Oeste de la isla. La vegetación es exuberante como siempre, si bien completamente distinta al Norte de Estewart Island.
No perdimos de vista Codfish Island (una isla santuario de 14km²) hasta que llegamos a Mason Bay y nos adentramos de nuevo en el corazón de la isla en busca del hut. En el hut estaban descansando nuestros colegas austriacos...
"Hola!" dijimos, "nosotros seguimos hasta el siguiente hut (Freshwater hut), que nos vemos con fuerza suficiente."
Para llegar a Freshwater hay que atravesar una zona pantanosa, impasable si llueve. Por este motivo, y en vista de que el tiempo era bueno, decidimos continuar nuestro camino. Hicimos un tramo de 14km en poco mas de 2 horas, nos veíamos fuertes al haber reducido considerablemente el peso de las mochilas. Además la idea de tomarnos una cerveza y una buena comida llevaba tiempo rondando nuestras cabezas... es irresistible después de 9 días caminando por ninguna parte... comida y cerveza, comida y cerveza...
Llegamos exhaustos a Freshwater, casi no sentíamos nuestros pies y rodillas... habíamos recorrido 30km previstos en 11horas en 7 horas y media. Sin duda había merecido la pena: Un watertaxi iba a recoger a un grupo de trampers y como no, nos unimos a ellos. Una vez mas la suerte nos acompañaba y veíamos la cerveza y la buena comida mas y mas cercana.
Durante el trayecto del watertaxi nos paramos a ver una manada de delfines que se adentraban en agua dulce para limpiarse todos los parásitos acumulados en el mar de agua salada... lo mas parecido a darse una ducha. Uno de ellos era inmenso. Curiosamente los vimos en una zona que forma parte del track pero que se inunda cuando la marea está alta.
Cuando llegamos a Oban (el único pueblo de la isla -350 habitantes-) era tarde (las siete y media) no teníamos donde dormir. Los 2 backpackers de la isla estaban llenos... y solo nos quedó preguntar si había sitio en el mini hotel... tuvimos suerte, una vez mas, solo quedaba una habitación libre con 2 camas... genial!
El día siguiente lo pasamos descansando en Oban... sin hacer nada mas que hablar con sus apacibles habitantes. Nos encontramos con todos personajes que habiamos conocido durante esos días: el conductor del watertaxi y los DOCs de Bungaree hut. Se acercaron afectuosos a felicitarnos y a preguntarnos qué tal había ido todo. Todos los habitante de Oban nos recibieron con los brazos abiertos y nos dijeron lo mismo:
"Queremos que la gente que viene REALMENTE a conocer la isla se sienta como en casa...a los que vienen a decir que han estado aquí sin moverse del backpackers o el hotel no les hacemos ni caso."
Nos complace ser de los primeros.
Como curiosidad, un DOC que conocimos en Oban nos contó que no había kiwis ni kakapos (un hibrido entre buho y loro) en Stewart Island hasta 1910, cuando hubo un naufragio de un barco que transportaba unos cuantos de ellos a una exposición en Wellington. De hecho el primer kiwi que se vio en Mason Bay fue en 1950. Sin embargo en la actualidad Stewart Island alberga la mayor cantidad de kiwis de toda Nueva Zelanda (unos 25.000), y lo que es mas sorprendente: Solo quedan kakapos en Stewart Island.
El día 4 de Abril teníamos reservado el ferry para volver a Bluff para las 15:30... el trayecto fue bastante movido puesto que el mar estaba un poco revuelto, pero aun así fue emocionante sentarse en la popa del barco mientras nos salpicaban las olas del Estrecho de Foveaux. Cuando llegamos Bluff decidimos ir a Dunedin, donde nos encontramos ahora... una magnifica ciudad, sin duda digna de mención. Ya sabréis de ella en su debido momento.
Ciao Stewart Island!!
Fotos: Kakapo, Carlos en el Pantano, Puesta de Sol en el Watertaxi 1 y 2, Delfines, Miguel Sujetando la Cadena del Ancla, Miguel con los Austriacos, Carlos y Miguel en Oban, Miguel, Carlos.
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