Milford Track (53,5 Km)

Del 19 al 20 de Octubre

Lunes, seis de la mañana... "¡Buenos días!"

¡Por fin! Después de 3 meses sin pisar un track volvemos al monte. A pesar de habernos resistido durante meses a hacer el Milford Track, ha llegado la hora. Se dice que es una de las rutas más bonitas del mundo y por tanto una de la más transitadas. Sin duda es la más famosa de Nueva Zelanda y cada año pasan por ella miles de personas, tantas que durante la tenmporada de verano es imprescindible hacer reservas con un año de antelación. Nosotros hemos accedido a hacerla por estar fuera de temporada y porque, al haber un alto riesgo de avalancha, está vacía.

Los maoríes acudían al Milford Sound en busca del jade que se puede encontrar en esta zona, por ser abundante muy peculiar. Donald Sutherland y John Mackay fueron los primeros exploradores europeos en cruzar por el Milford Track desde Te Anau hasta el Milford Sound en 1880. Por su parte Quintin Mackinnon fue la primera persona que desveló los secretos del paso al público y comenzó a llevar turistas al fiordo por aqella ruta.

Ésta vez nos tocaba a nosotros.

A primera hora de la mañana cogimos un barco que nos dejaría en el comienzo del track, en "Glade Wharf". La travesía por el lago Te Anau (el segundo lago más grande de NZ) duró casi dos horas y media. Estábamos acompañados por otras cinco personas: Tres hombres bien entrados en años, que iban equipados con crampones y hachas, y una peculiar pareja de inglesas de mediana edad.

El día parecía estropearse por momentos, amenazando con llover en cuanto nos pusiéramos a andar. Así fue, al poco de ponernos en marcha comenzó a caer, de forma intermitente, una fina lluvia que haría el camino más agradable y mágico. El camino trancurre siguiendo el río Clinton por unos preciosos hayedos flanquedos por inmensas paredes de piedra. Las casacadas crecían por momentos, multiplicándose en número, vertiendo agua de forma ininterrrumpida al valle. La sensación resultó ser tan abrumadora que se nos quitaron todos los fantasmas que teníamos sobre el Milford Track (...sería demasiado fácil, demasiado turístico...). Aquel día Manuel y Juli llegaron a hacer casi 200 fotografías a pesar de estar lloviendo.

Todo iba de maravilla hasta que las dos inglesas se cruzaron con unos miembros de DOC que les dijeron que nos estábamos jugando la vida. Que no debíamos seguir o volveríamos en un cajón de pino... Ésto fue suficiente para que los otros tres hombres que venían en el barco (los de los crampones y hachas) se echaran atrás. Cierto es que solo el primer día tuvimos de pasar por 56 zonas con alto riesgo de avalancha, y aunque no te ceyeran encima, siempre pueden causar demoras y hacerte dar bastantes rodeos. En cualquier caso ninguna de estas amenazas nos detendría, no doblegarían nuestra voluntad.

Poco a poco el camino asciende hasta Lake Mintaro donde se encuentra el Mintaro Hut (21,5 km), allí haríamos noche.

El segundo día (14 km) salió el sol y nos permitió ver desde lo alto el increible escenario en el que habíamos dormido.

Tuvimos mucha suerte con el tiempo, si no llega a haber salido el sol, no habríamos sido capaces de cruzar el Makinnon Pass. A pesar de que el punto más alto del circuito está a poco más de 1000 metros de altura, puede haber tremendas nevadas en pleno verano y cubrir de nieve a una persona en cuestión de minutos. La vegetación se torna alpina, desaparecen las hayas reemplazadas por el tussoc, y hacen acto de presencia las Kias. Atravesamos parches de nieve que enlentecieron el paso hasta el punto de que Miguel se hundió hasta la cadera. En cualquier caso el principal riesgo seguían siendo las impredecibles avalanchas.

Cuando llegamos a la cima del Makinnon Pass una Kia nos mostró las espectaculares vistas del Clinton Canyon y Lake Mintaro, a un lado, y de la "caida de los 12 segundos" al otro. Comimos e iniciamos el continuado descenso de 970 metros hasta el Dumpling Hut. Ocho kilómetros de descenso en los cuales volvió a cambiar por completo la vegetación y durante los cuales cruzamos cascadas de ensueño.

Subir es duro pero placentero. Bajar es siempre más complicado y doloroso. Cuando llegamos al hut no podíamos pensar en otra cosa que no fuera quitarnos las botas.

1 comentario:

  1. MIguelón




    si pareces Rocío JURADO en COMO UNA OLAAAAAAAAAAAAAA.....


    lallalal LLEGÓ A mI VIDAAAAAAAAA....

    COMO UNA OLAAAAAAAAAAAAAAAA:...


    lallalal DE ALEGRÏAAAAAAAAAAAAAA

    CMO UNA OULAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA


    vaya pelucón jajjaajajja


    con miras a Los Fiordos o lo que quieras pero COMO UNA OLAAAAAAAAAAAAAAAA


    tu hermana



    que te echa de menos


    ps no me puedo mover, me duele tó entre que el otro día me dí una galleta impresionante en la calle y besé el asfalto(no me he roto los dientes, no) porque hice globo con la boca por si acaso) pero practicamente me rompí las costillas al rebotar con el sprinkler del agua. Ayer que empecé mis clases de boxeo!!!!!

    Con Alicia Ashley, varias veces campeona del mundo, mucho todo eso pero hubo un momento que ni enfocaba de lo exhausta y casi caigo KO

    Eso sí ya me he puesto los guantes

    chas chas

    y ya conozco ocho movimientos


    chas chas

    y hoy no me puedo mover


    chasss

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